El Síndrome de quemarse en el trabajo se produce por la conjunción de una serie de variables. Es el resultado de un proceso de interacción mediante el cual el sujeto busca ajustarse a su entorno laboral y son muchas las variables que se ponen en marcha a la hora de explicar el síndrome. Algunas de las variables serían:
VARIABLES ORGANIZACIONALES
- Situaciones como la sobrecarga laboral (cuando existe demasiada estimulación y reto en el puesto, por ejemplo que un enfermero tenga sobrecarga laboral implica no poder atender a los pacientes como desearía, recibir quejas de los pacientes y de los familiares e incluso de los propios compañeros y así se pueden producir sentimientos de falta de aptitud profesional y baja realización personal), pobreza de rol (posición en la que existe muy poca estimulación y reto). En ambos casos el sujeto pierde autonomía y control que conlleva a una perdida de autoimagen y sentimientos de irritabilidad.
- Las diferentes culturas organizacionales, por ejemplo, una burocracia mecánica, que se caracteriza por la estandarización del trabajo y la formalización puede producir en las personas rutina, monotonía y falta de control, mientras que una burocracia profesionalizada el síndrome está ocasionado por la relativa laxitud de la estructura que conlleva una confrontación constante con los demás, y origina ambigüedad de rol.
- Con respecto a los contenidos del puesto de trabajo, que un empleo no permita poner en práctica las habilidades adquiridas para con las personas.
- La falta de retroinformación sobre cómo se realiza el trabajo, puede dar lugar a falta de realización personal.
- Estresores del ambiente físico como ruido, confort físico pueden ser importantes a la hora de desencadenar estrés laboral, y por consiguiente aumentar la probabilidad de sufrir el síndrome de quemarse.
- Demandas estresantes del puesto también pueden contribuir a aumentar el estrés como el trabajo nocturno, estar expuesto a riesgos y peligros.
- La ambigüedad de rol es el grado de incertidumbre que el sujeto que desempeña un rol tiene respecto al mismo. Puede estar producido por falta de información cuantitativa y cualitativa, que impide un desarrollo adecuado del rol por parte del sujeto. Los profesionales de las instituciones de servicios se encuentran constantemente en situaciones de ambigüedad de rol, en el sentido de asumir funciones que no son propias de su rol, por ejemplo un enfermero que ha de atender las emociones de un paciente. Esto afectaría a los sentimientos de realización personal.
- El conflicto de rol, no es un conflicto interpersonal sino entre expectativas, por ejemplo el sujeto recibe dos expectativas diferentes de uno o varios miembros de la organización pero no puede satisfacer ambas puesto que son contradictorias. Por ejemplo es fácil que un profesional tenga que atender las necesidades de los clientes por un lado y de la institución al mismo tiempo. Produciría sentimientos de agotamiento y despersonalización.
- Posibilidades de desarrollarse en la carrera y posibilidades de promoción. La falta de seguridad en el puesto de trabajo produce agotamiento emocional
- Las nuevas tecnologías, pueden influir negativamente sobre las personas dependiendo de variables como el grado de adaptación requerido, el ritmo de trabajo impuesto, el aislamiento social, disfunciones en los roles, etc.
- Grado de participación de los trabajadores en la toma de decisiones, la autonomía a la hora de tomar decisiones sin tener que consultar a un supervisor.
VARIABLES INTERPERSONALES
- Las relaciones deterioradas con el personal de la organización afectan a la calidad de las relaciones con los usuarios, aumentando los sentimientos de estar quemado.
- La falta de cohesión del grupo puede ser un desencadenante del síndrome. El apoyo técnico y emocional por parte de los demás miembros de la organización es importante a la hora de no quemarse en el trabajo.
- Pensamientos sobre lo que uno hace por sus compañeros, jefes, receptores de su trabajo y lo que recibe de ellos, por ejemplo, es fácil, por ejemplo que las expectativas de recompensa y equidad de una enfermera aparezca frustradas frecuentemente, pues los pacientes suelen estar ansiosos y preocupados y la interacción con ellos no resulte recompensante.
- Pérdida de apoyo social en el trabajo al no pedir ayuda de los demás por miedo a ser criticado y ser considerado inepto.
- Pérdidas o amenazas que una persona siente al relacionarse con los demás (supervisores, compañeros, personas hacia las que se dirige el trabajo).
VARIABLES PERSONALES
- Son aquellas variables relacionadas con la forma en la que un sujeto interpreta aquello que le rodea. Las cogniciones de un individuo influyen en su forma de interpretar el mundo que le rodea, y de esta interpretación se deriva un sentimiento y una forma de actuar posterior. En general supone un desajuste entre las expectativas del profesional y la realidad cotidiana, y el grado de adaptación entre estas y aquellas Las expectativas que un profesional cuando comienza su andadura profesional o un trabajo son:
- Expectativas altruistas: poder ayudar a los que sufren.
- Expectativas profesionales: ser un profesional competente y ser considerado como tal.
- Expectativas sociales: Tener un prestigio social y buenos ingresos económicos.
- Trabajadores que piensen no haber sido capaz de alcanzar sus objetivos o pierda la esperanza por conseguirlos y sientan insatisfacción en su trabajo.
- Personas muy motivadas que hayan atribuido un significado existencial a su trabajo y sientan frustradas sus expectativas.
- Las personas con bajos sentimientos de autoeficacia que no confían en poder hacer bien las cosas en su trabajo tienen más estrés y por tanto mayor posibilidades de quemarse en el puesto de trabajo.. Se trata de incertidumbre a la hora de cómo hacer un trabajo o bien qué se espera de ellos a nivel personal.
- Cuando una persona considera que existe una gran diferencia entre la demanda que le exige su trabajo y los recursos de los que dispone para hacerle frente, desarrolla sentimientos de desilusión y pérdida. Si además es pesimista con respecto al éxito en la resolución de dicha discrepancia, la persona puede llegar a sufrir el síndrome.
- Los profesionales más proclives a quemarse son aquellos más empáticos, sensibles, con dedicación profesional, idealistas, altruistas, entusiastas, susceptibles de identificarse con los demás.
- Las personas más resistentes al síndrome se caracterizarían por tres actitudes: compromiso, control y reto. El compromiso se refiere al sentimiento de valor personal con respecto a sí mismo y a lo que hace, y por tanto implicarse en las diferentes situaciones de la vida (trabajo, familia, relaciones personales e institucionales. El control se refiere a la tendencia a creer que uno mismo influye en los eventos y resultados de las acciones, al creer esto uno pone en marcha estrategias para solucionar los problemas y no siente indefensión las acciones de los otros, el azar o el destino. Aunque creer en un excesivo control, y creer que todo se puede solucionar si se le pone la suficiente implicación también es perjudicial. El reto, las personas que perciben los cambios como oportunidades para desarrollarse más que como una amenaza a su seguridad, buscan nuevas experiencias y se aproximan a ellas con flexibilidad.
- Personas con ciertas características de la personalidad o Trastornos de la Personalidad. Las personas más vulnerables son las que tienen un alto grado de autoexigencia con baja tolerancia al fracaso, buscan la perfección absoluta, necesitan controlarlo todo y en todo momento, desarrollan el sentimiento de indispensabilidad laboral y son muy ambiciosos. Estas características corresponderían a una personalidad obsesiva-compulsiva